El Foro de Davos reúne a 2.500 líderes políticos y económicos del mundo para abordar los principales temas de la agenda global desde una perspectiva económica. El patrón del foro, el suizo Klaus Schwab, se dijo sorprendido por la cantidad de asuntos que se debaten este año. «Desde hace 46 años (cuando se inauguraron los encuentros de Davos) no recuerdo haber tenido que enfrentar tantos problemas al mismo tiempo» declaró.
A continuación, un repaso de los principales temas en debate:
Economía global
Las caídas de los mercados hacen que la economía global sea uno de los temas principales en Davos.
En el último ejercicio el crecimiento económico global no superó el 3% y se esperan cifras similares para este año. Preocupa especialmente el hecho de que China «solo» crecerá un 6,9% este 2016, su peor cifra de los últimos 25 años.
Brasil seguirá en recesión en 2016, según las últimas perspectivas del Fondo Monetario Internacional. El inversor estadounidense Paul Singer, de Elliott Management, advirtió esta semana que en este momento hay un endeudamiento del sistema financiero global de entre US$ 40 y 80 billones en productos derivados.
El precio del petróleo
El barril de crudo se depreció casi dos tercios de su valor desde mediados del año pasado (de US$ 100 a US$ 30) y esto preocupa a los líderes políticos y económicos que asisten al Foro.
En un debate sobre las nuevas necesidades energéticas, el presidente de la petrolera estatal Saudi Arabian Oil (Saudi Aramco), Jalid al Falih, estimó que los precios del hidrocarburo comenzarán a subir previsiblemente este año, luego de los espectaculares descensos que ha experimentado esa materia prima.
Arabia Saudita es el país que dentro de la OPEP ha liderado la estrategia de bombear crudo por encima de la demanda para hundir los precios y expulsar del mercado a sus competidores.
Otro de los participantes en el debate, el consejero delegado de la petrolera italiana Eni, Claudio Descalzi, apuntó que el crudo podría superar los 200 dólares en 2020.
Descalzi estimó que la industria petrolera recortará sus inversiones entre el 10% y el 13% este año por la caída de precios.
Gran Bretaña en la UE
La isla renegocia su estatus en el bloque regional y, si las autoridades europeas no hacen caso a sus requerimientos, el país seguramente se retirará del organismo internacional.
David Cameron, primer ministro británico, pretende excepciones para asuntos de inmigración y competencia. Desea que la UE los resuelva a su favor para no tener que retirarse.
Los demás países del bloque solicitan hacer lo posible para que el país se mantenga, y así evitar una catástrofe económica.
Crisis de los refugiados
En las primeras tres semanas de enero llegaron unas 35.000 personas a Europa para solicitar la calidad de refugiados, después de que en 2015 se cruzara la barrera de más de un millón de ingresos.
Algunos líderes plantean revisar el acuerdo Schengen, por el cual están abiertas las fronteras adentro de Europa. Otros, como el primer ministro de Holanda y presidente de turno del Consejo de la UE, Mark Rutte, sugieren primero cumplir con el Acuerdo de Dublín. Este tratado regula el procedimiento del asilo en Europa y establece, entre otras cosas, que son los países de llegada los que deben tramitar las solicitudes de asilo de los refugiados. Esto incide en un mayor peso (económico y administrativo) para Grecia e Italia, que piden más ayuda para hacer frente al dilema.
Terrorismo
La amenaza del terrorismo está presente en la cumbre y los líderes han planteado diferentes alternativas.
El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schauble, planteó que los países arrasados por los conflictos armados, en particular Siria, necesitarán una suerte de Plan Marshall, en referencia al diseñado por Estados Unidos tras la la Segunda Guerra Mundial para la reconstrucción de Europa.
Por su parte, el primer ministro de Francia, Manuel Valls, consideró que su continente convivirá varios años con la amenaza del terrorismo, incluso una generación entera, ya que los conflictos de los que se han nutrido las organizaciones terroristas -como los de Siria, Irak o Libia- no podrán resolverse en el corto plazo.
Robots soldados
Se estudia si conviene o no alentar el desarrollo de robots para que combatan en conflictos armados. Ya no se trata de drones, que son controlados por humanos, sino de máquinas autónomas.
Durante un debate organizado por la Universidad de California durante el Foro, se planteó qué pasaría si a una máquina se le asigna una misión de guerra y ésta decide atacar cuando ella quiera. La reflexión abordó las preguntas en torno a cómo puede una máquina diferenciar entre un civil y un soldado o un combatiente de un bando y un rebelde.