Crédito columna: Alexandre Perini.
A pesar de su importancia, el tema es en gran medida ignorado y, a menudo, visto como un tabú. Sin embargo, acumular deudas o mantener malos hábitos financieros puede alejarte cada vez más de alcanzar tus planes y sueños.
Por eso, vale la pena comprender más sobre el tema para mejorar el control de tu presupuesto, poder ahorrar dinero y, cuanto antes, comenzar a invertir. De esta manera, aumenta sus posibilidades de tener un futuro financiero saludable y seguro.
¿Qué es la educación financiera?
Es bastante común que la expresión educación financiera se vincule con la idea de ahorro de recursos. Sin embargo, su significado es mucho más amplio que simplemente ahorrar dinero. De hecho, el concepto hace referencia a la capacidad de comprender y gestionar sus recursos de forma consciente y responsable.
Quienes tienen una buena educación financiera saben planificar, invertir y gastar el dinero según sus objetivos y necesidades. Además, estas personas están en mejores condiciones de afrontar la información y los riesgos que afectan a los activos, tanto a corto como a largo plazo.
Con este conocimiento podrás mejorar tu calidad de vida, evitar deudas, alcanzar metas y hacer realidad sueños. En cualquier caso, para desarrollar esta habilidad es necesario buscar conocimiento, disciplina y hábitos saludables en relación al dinero.
Aunque esto pueda parecer complicado, hay varias medidas que se pueden adoptar en el día a día y que contribuyen a esta construcción. Por lo que vale la pena tomarse el tiempo para desarrollar conocimientos y mejorar su educación financiera, buscando aprovechar los beneficios que ésta brinda.
Desarrollar el hábito de ahorrar
Uno de los primeros pilares de la educación financiera es el desarrollo del hábito del ahorro. Se trata de la práctica recurrente de apartar una parte de los ingresos habituales, en lugar de gastarlos en su totalidad o incluso asumir costes superiores a los ingresos mensuales.
Ahorrar dinero le permite acumular recursos con el tiempo, construyendo una red de seguridad financiera y medios para lograr diferentes objetivos. Este hábito, cuando se incorpora de manera constante, contribuye a construir una base financiera más sólida y estable.
Para desarrollarlo, el punto de partida es entender que se debe ahorrar una parte de los ingresos antes de cualquier gasto no esencial. En otras palabras, el principio se basa en la premisa de que, para tener tranquilidad financiera en el futuro, es necesario empezar a ahorrar en el presente.
El escenario tiene mucho sentido. Después de todo, si gastas todos tus ingresos cada mes, no podrás tener reservas financieras. Esto dificultará la acumulación de patrimonio y la consecución de logros, además de poner en riesgo tu tranquilidad respecto a las finanzas al momento de jubilarte y en fases desafiantes.
Seguimiento de gastos e ingresos
Monitorear de cerca los ingresos y gastos financieros es una práctica esencial en la gestión de un presupuesto personal o familiar. Este seguimiento detallado tiene como objetivo aumentar su control financiero, prevenir situaciones de sobreendeudamiento y despilfarro de dinero.
Al comprender sus patrones de gastos, podrá ajustar los gastos en consecuencia, reduciendo la acumulación de deudas innecesarias. Este enfoque proactivo proporciona una gestión presupuestaria eficiente.
Recuerde que monitorear la salida y entrada de recursos permite identificar oportunidades, tanto para ahorrar como para aumentar los ingresos. Por este motivo, el control detallado de las finanzas es un pilar de la educación financiera.
Planificación financiera realista
Otro principio incluido en la educación financiera es la búsqueda de una planificación financiera realista. La premisa es crear una guía estratégica que cubra metas, prioridades y eventualidades de corto, mediano y largo plazo.
Sin embargo, al adoptar esta práctica debes tener en cuenta que de nada tiene sentido plantearte una meta que no sea compatible con tu situación financiera actual o que no puedas alcanzar. Esta medida puede desincentivar la ejecución y continuidad de los planes trazados, así como dificultar la consecución de otros objetivos.
El enfoque correcto, con planes y objetivos realistas y alcanzables, permite una asignación eficiente de su capital. Así, los objetivos se pueden alcanzar de forma paulatina, dependiendo de tu realidad financiera.
¿Qué importancia tiene la educación financiera?
Observando algunos principios de la educación financiera ya puedes tener una idea de su importancia, ¿verdad? Como has visto, una educación financiera coherente tiene como objetivo permitir al individuo tomar decisiones informadas sobre el uso del dinero.
Con el conocimiento adecuado, podrá tomar decisiones coherentes que contribuyan a lograr los resultados esperados. De esta forma, la educación financiera ayuda a las personas a transformar el dinero en una herramienta para alcanzar sus objetivos.
Alexandre Perini
Cuenta con 31 años de experiencia en administración de empresas, tecnología de la información y mercado financiero seguimiento de los mercados brasileño, norteamericano, europeo y asiático, experto en Bovespa (Bolsa de Valores de Brasil) en renta fija, renta variable, fondos, criptomonedas y trader especializado en análisis gráfico.

🇧🇷 Experto Intl. en Inversiones y Bolsas de Valores
📚 Influencer en Educación y Mercado Financiero
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