El informe de mayo del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) marca el inicio de las estimaciones para la campaña 2025/26 con una proyección histórica para la producción mundial de soja, que alcanzaría los 426,8 millones de toneladas, superando el récord anterior de 420,9 millones estimado para el ciclo 2024/25. De confirmarse, este volumen consolidaría un crecimiento sostenido en la oferta global de esta oleaginosa clave.
El consumo mundial de soja se incrementaría en 3,4%, impulsado principalmente por la mayor demanda en China, donde la harina de soja mantiene su rol esencial en la alimentación animal, especialmente en el sector porcino. En paralelo, se espera que Estados Unidos también contribuya a este crecimiento, con un aumento proyectado del 2,0% en el consumo interno de harina, vinculado a una mayor producción de carne de cerdo y aves.
Menores stocks globales podrían presionar los precios
En este escenario, el procesamiento global de soja continuará en expansión, con un papel protagónico tanto de China como de Estados Unidos en la demanda final. Como consecuencia, la relación stock/consumo —indicador clave del equilibrio del mercado— se reduciría por segundo año consecutivo, ubicándose en 29,3%. Esta tendencia podría generar presiones alcistas sobre los precios, especialmente ante la posibilidad de eventos climáticos adversos o interrupciones en la oferta.
Brasil y Estados Unidos, actores clave
Respecto a Brasil, principal exportador global, el USDA proyecta que consolide su liderazgo en el comercio mundial, al representar el 60% del total exportado en la campaña 2025/26. Asimismo, se estima una producción de 175,0 millones de toneladas, lo que implica un incremento de 6,0 millones respecto al ciclo anterior.
Estados Unidos, por su parte, comienza la campaña con un avance del 76% del área sembrada estimada, y con un 50% de los cultivos ya emergidos. Las lluvias recientes han contribuido a mejorar la humedad del suelo en diversas regiones, configurando un comienzo de ciclo favorable desde el punto de vista agronómico. No obstante, se prevé una reducción del 4,1% en la superficie cultivada, que se ubicaría en 33,8 millones de hectáreas.
China, el gran demandante
En el caso de China, el USDA proyecta importaciones por 112,0 millones de toneladas en la campaña 2025/26, lo que representa un incremento de 3,7% respecto al ciclo previo. A su vez, el consumo interno del país asiático seguiría creciendo, con una demanda total estimada en 133,0 millones de toneladas.
Clima: factor clave a seguir
El contexto climático cobra relevancia con el inicio de la siembra en Estados Unidos. Según la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA), el océano Pacífico tropical permanece bajo condiciones ENSO-neutrales, sin señales claras de un fenómeno El Niño o La Niña. Aunque se observan indicios débiles asociados a una posible fase fría, predominan condiciones dentro de los rangos normales, un dato clave para la agricultura global, ya que cualquier cambio en el patrón ENSO podría modificar la distribución de lluvias y temperaturas.
