El Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) resolvió cancelar el proceso de compra de máquinas de votación y convocará a una nueva licitación, esta vez para el arrendamiento de los equipos, conforme a la resolución 759/2025.
El senador Dionisio Amarilla valoró la medida, señalando que evita comprometer al Estado con una inversión de US$ 100 millones en equipos que podrían quedar obsoletos. En su lugar, estimó que el arrendamiento no superaría los US$ 25 millones, representando un ahorro significativo en el corto plazo.
El legislador recordó que el proceso de compra inicial presentaba serias irregularidades, entre ellas la falta de certificaciones internacionales, lo que ya había sido advertido por la Comisión de Asuntos Electorales. “Un solo voto escrutado no tiene que quedar en tela de juicio”, afirmó, destacando que la prudencia y el sentido común obligaban a suspender el llamado.
Amarilla también criticó la “apresurada interpretación” de la resolución del Senado, que exhortaba a suspender la compra en atención a los cuestionamientos. Subrayó que lo fundamental es fortalecer la institucionalidad y garantizar legitimidad en los procesos electorales.
Finalmente, expresó su confianza en los ministros del TSJE, aclarando que no participan en la elaboración ni evaluación de los pliegos de bases y condiciones de las licitaciones.
