Paraguay vuelve a posicionarse en el mapa deportivo internacional con la organización de la final de la Copa Sudamericana 2025, un evento que no solo atraerá la atención de fanáticos del fútbol, sino que también generará un importante dinamismo económico en sectores como turismo, hotelería, gastronomía y servicios.
En conferencia de prensa, el ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez, destacó que se trata de una oportunidad única para mostrar la capacidad organizativa del país.
“Estamos muy contentos porque seguimos en esta senda de grandes atracciones deportivas. Los números preliminares conservadores presentados por la Conmebol apuntan a la asistencia de entre 40.000 y 50.000 personas para la final”, señaló.
El titular del MIC subrayó que eventos anteriores, como la final entre Racing y Cruzeiro, tuvieron un impacto positivo directo en la economía local, especialmente en las Mipymes y el sector servicios. Para esta edición, las estimaciones apuntan a un ingreso de entre 38 y 42 millones de dólares, considerando además de la venta de entradas, el FanFest, la ocupación hotelera y los servicios asociados al encuentro.
La final está prevista para el 22 de noviembre en Asunción, aunque la sede específica aún no fue confirmada por la Conmebol. La organización estará a cargo de un comité interinstitucional, con la participación de varios ministerios y entes públicos, siguiendo la instrucción del presidente de la República, Santiago Peña, para ofrecer “una gran fiesta que Paraguay ya está acostumbrado a dar”, según manifestó Giménez.
El ministro recordó la experiencia reciente del país como anfitrión de eventos deportivos internacionales, como el World Rally Championship en Itapúa, resaltando el “diferencial marcado” de Paraguay como destino confiable y atractivo para el deporte de alto nivel.
Con este anuncio, Paraguay se prepara para recibir nuevamente a miles de visitantes en un acontecimiento que trasciende lo deportivo y se convierte en una palanca de crecimiento económico y visibilidad internacional.
