El viceministro de Mipymes, Gustavo Giménez, destacó que la nueva normativa incorpora beneficios inéditos como la exoneración de impuestos, acceso a seguridad social y apertura simplificada de cuentas bancarias, marcando un cambio histórico en el ecosistema emprendedor paraguayo.
La nueva Ley de Mipymes se perfila como un hito para el sector emprendedor y las pequeñas empresas del país. La normativa introduce beneficios sin precedentes que buscan incentivar la formalización de más de un millón de emprendedores, según explicó el viceministro de Mipymes, Gustavo Giménez, en entrevista con Paraguay TV.
“Es la primera vez que el país ofrece beneficios de este tipo al sector emprendedor. Queremos que las Mipymes crezcan y se fortalezcan, porque su desarrollo también significa empleo, producción y desarrollo para el Paraguay”, afirmó Giménez.
Entre las novedades más relevantes se incluyen la exoneración temporal de impuestos, la incorporación de trabajadores y propietarios al sistema de seguridad social y la apertura simplificada de cuentas bancarias comerciales, medidas que apuntan a reducir la informalidad y mejorar el acceso financiero.
Un salto hacia la inclusión económica
El viceministro señaló que el país avanza hacia un modelo económico más inclusivo, donde las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) puedan operar en igualdad de condiciones y con un acompañamiento integral desde el Estado.
Actualmente, más de 450.000 Mipymes cuentan con Registro Único de Contribuyentes (RUC) en Paraguay. Sin embargo, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), alrededor de un millón de emprendimientos aún operan en la informalidad, lo que representa un gran potencial económico y fiscal pendiente de incorporación al sistema formal.
“Nuestro trabajo no termina en la inscripción. Acompañamos a los emprendedores desde la idea inicial hasta la puesta en marcha del negocio formal, ayudándolos a crecer de manera sostenible”, explicó Giménez.
Facilidades financieras y protección social
Uno de los principales desafíos que enfrenta el sector es la inclusión financiera. Según estimaciones oficiales, el 60% de las microempresas no cuenta con una cuenta bancaria, lo que limita su acceso a créditos y herramientas financieras para expandirse.
Por ello, la nueva ley prevé la habilitación de cuentas comerciales simplificadas, un paso clave para integrar a los emprendedores al sistema financiero y permitirles acceder a productos crediticios y servicios digitales.
Otro componente innovador de la normativa es la extensión de la cobertura del Instituto de Previsión Social (IPS) para los dueños e integrantes familiares de microempresas, garantizando seguro médico y protección jubilatoria.
“La mayoría de las microempresas son familiares, donde padres e hijos trabajan juntos sin cobertura. Esta ley les permitirá cotizar al IPS y acceder a derechos que antes estaban fuera de su alcance”, enfatizó el viceministro.
Formalización para el desarrollo
El sector de las Mipymes representa el principal motor del empleo en Paraguay: 8 de cada 10 paraguayos trabajan en una micro, pequeña o mediana empresa.
Por ello, avanzar en la formalización no solo significa ampliar la base contributiva, sino también mejorar la calidad de vida y la estabilidad laboral de miles de familias.
“Cada Mipyme formalizada significa una familia con mayor seguridad, un emprendimiento más competitivo y un país que crece con bases sólidas”, concluyó Giménez.
