El Banco Central del Paraguay (BCP) introdujo recientemente ajustes clave a la normativa aplicable a la negociación de Letras de Regulación Monetaria (LRM), con el objetivo de profundizar la liquidez y la participación en el mercado secundario de estos instrumentos financieros.
Las LRM son títulos emitidos por el BCP para regular la liquidez estructural del sistema financiero. Su función esencial dentro de la política monetaria es permitir al emisor influir sobre las tasas de interés de corto plazo, ofreciendo una herramienta eficaz para orientar el comportamiento de los agentes económicos.
Con el sostenido crecimiento del mercado financiero local, las LRM se posicionan como una alternativa de renta fija atractiva tanto para inversionistas institucionales como para personas físicas. A este contexto se suma el reciente logro del grado de inversión por parte de Paraguay, otorgado por una calificadora internacional, lo cual mejora el perfil de riesgo país y refuerza la confianza de los mercados en su estabilidad macroeconómica.
Más acceso y menos restricciones
La nueva normativa establece que cualquier persona física o jurídica residente en Paraguay podrá adquirir LRM en el mercado secundario, mediante operaciones con bancos y financieras que hayan accedido a estas letras en la emisión primaria. Esta apertura representa un avance importante hacia la democratización del acceso a instrumentos financieros de política monetaria.
Además, se eliminó la exigencia de mantener un saldo mínimo diario de LRM en balance, un requisito que anteriormente restringía la participación de algunos actores en el mercado secundario. Esta flexibilización busca incentivar una mayor inclusión de intermediarios financieros y aumentar la rotación de estos instrumentos, promoviendo un mercado más dinámico.
Hacia una curva de rendimientos local
Uno de los beneficios esperados de esta mayor actividad en el mercado secundario es la posibilidad de construir una curva de rendimientos más representativa para los plazos y tasas negociadas. Esta referencia será clave para la formación de precios de otros instrumentos financieros, así como para una valoración más precisa en los balances de las entidades participantes.
Con estas modificaciones, el BCP apunta a consolidar un mercado de dinero más profundo, competitivo y eficiente. La medida se alinea con las mejores prácticas internacionales en materia de desarrollo de instrumentos financieros y transparencia del sistema monetario.
