El ministro de Economía y Finanzas, Carlos Fernández Valdovinos, aseguró que el sector docente ha sido el más favorecido en términos presupuestarios durante los últimos dos años. Según sus declaraciones, los principales reclamos que hoy motivan la huelga docente ya se encuentran contemplados en las proyecciones oficiales.
«En números, ellos fueron los más beneficiados durante estos dos años de gestión», expresó en una entrevista radial este lunes, al tiempo de precisar que los recursos destinados al sector docente «por lejos superan los US$ 100 millones en estos dos años».
El titular del MEF detalló que bajo esta administración se otorgaron los fondos necesarios para implementar el escalafón docente, que llevaba cinco años de retraso. «Este 2025 estamos normalizando todo lo que es escalafón docente, y está garantizado también para el año que viene. Reconocimos el salario mínimo profesional que llegó a los niveles que debería llegar», puntualizó.
Presupuesto 2026: foco en escalafón, aumentos y ajuste por inflación
En cuanto a la previsión presupuestaria para el próximo año, Fernández Valdovinos informó que se incorporaron unos US$ 70 millones destinados al Ministerio de Educación, de los cuales US$ 9 millones corresponden específicamente al escalafón docente, US$ 32 millones a aumentos salariales y aproximadamente US$ 20 millones al ajuste por inflación.
Respecto a la huelga, señaló que, pese a la reunión previa mantenida entre el MEF y los gremios docentes, «ilógicamente querían más» y pretendían que el ministerio ignore los cálculos de inflación del Banco Central del Paraguay. «Evidentemente ya estaba decidido que querían hacer esta movilización», remarcó.
El desafío de la jubilación docente
El ministro también abordó la sostenibilidad del sistema previsional del sector docente, al que calificó como uno de los más deficitarios, junto con el de policías y militares.
«Este sector debería ser consciente de que no es sostenible este modelo que tienen, donde hay gente que se jubila muy joven», subrayó, recordando que 20 años de aporte del 16% del salario no pueden sostener el pago del 100% de la remuneración durante tres décadas.
«Pretender seguir con ese mismo esquema es irracional y es hasta un engaño para todos los docentes que el día de mañana se quieran jubilar y correr el riesgo de que no se les pague nada», concluyó.
