En la foto: Lea Giménez, jefa de Gabinete de la Presidencia y Rubén Ramírez, canciller paraguayo.
Asunción, 8 ago (EFE).- El Gobierno de Paraguay manifestó este jueves que «la intervención directa o indirecta» de otros países en asuntos internos compromete la independencia y la soberanía del país, luego de que se conociera que Estados Unidos actualizó sanciones en contra de una empresa tabacalera local, por posiblemente brindar apoyo financiero al expresidente paraguayo Horacio Cartes (2013-2018), también sancionado por supuesta corrupción.
«La intervención directa o indirecta de cualquier Estado en los asuntos internos del Paraguay compromete la independencia y soberanía de la República», sentenció en una conferencia de prensa el ministro de Relaciones Exteriores de Paraguay, Rubén Ramírez.
El jefe de la diplomacia paraguaya ofreció esta declaración luego de reunirse con el presidente de Paraguay, Santiago Peña, y de conocer la nueva sanción que impuso el martes la Oficina de Control de Activos Extranjeros (Ofac, en inglés) del Departamento del Tesoro de EE.UU. a la empresa paraguaya Tabacalera del Este, en la que Cartes tenía participación.
El canciller, que más temprano convocó al embajador de Estados Unidos en Paraguay, Marc Ostfield, para abordar la designación de la tabacalera, indicó que la supuesta «intromisión» también transgrede «principios del derecho internacional».
Entre ellos señaló el derecho a que para toda sanción se conforme «mínimamente con el debido proceso y la inviolabilidad de la defensa», » ampliamente reconocidos por la comunidad internacional».
Las autoridades estadounidenses sancionaron a Tabacalera del Este porque supuestamente «ha realizado y planea seguir realizando pagos por valor de millones de dólares a Cartes», pese a que fue designado como «significativamente corrupto» por EE.UU. en julio de 2022.
La empresa, que fue incluida el 31 de marzo de 2023 en la Lista de Nacionales Especialmente Designados y Personas Bloqueadas (SDN, por sus siglas en inglés) pues EE.UU. identificó que el expresidente tenía un 50 % o más de participación, aseguró que ha realizado pagos a Cartes por la venta de sus acciones y no para financiarlo.
No obstante, Ramírez precisó en su declaración que no harán «juicios de valor sobre el uso de herramientas administrativas que se enmarcan en la legislación americana», pero sí expresó su malestar «respecto de la forma» en que el embajador Ostfield comunicó las sanciones.
Por ello, anunció que Paraguay está solicitando a Estados Unidos acelerar el reemplazo de Ostfield para evitar que la «pérdida de confianza» afecte a las relaciones entre las naciones. EFE
