Estambul, 17 mar (EFE). – Los terremotos de febrero han causado daños en Turquía por valor de unos 2 billones de liras, equivalentes a 105.210 millones de dólares, estima un informe publicado este viernes por la Presidencia turca.
La cifra representa alrededor del 9% del producto interior bruto (PIB) de Turquía de 2022 y puede rebajar el crecimiento previsto del país en 1,4 puntos, según el informe.
Los terremotos del 6 de febrero pasado, de las magnitudes 7,8 y 7,6 en la escala abierta de Richter, causaron al menos 48.000 muertos en una enorme zona del sureste de Turquía que alcanza 11 provincias y son el desastre más mortífero que el país ha vivido en los últimos cien años.
El informe observa que los daños económicos causados multiplican por seis los del terremoto de Mármara en 1999, que tuvieron una magnitud similar y causaron 18.000 muertos, pero se limitaron a una zona concreta al este de Estambul.
Las 11 provincias afectadas ahora, algunas solo tangencialmente, albergan a 14 millones de ciudadanos y unos 1,7 millones de refugiados sirios, representando el 16% de la población total de Turquía, el 13% del empleo, el 10% del PIB y el 8,6% de las exportaciones.
La destrucción de edificios representa la mitad de los daños económicos, unos 53.363 millones de dólares, mientras que el gasto de atención urgente tras los seísmos, entre tiendas de campaña, medios de evacuación y ayudas económicas a los afectados llega a 6.900 millones.
Solo los vehículos destruidos por el terremoto representan una pérdida de 320 millones de dólares, calcula el informe.
La zona más afectada, con diferencia, es la provincia mediterránea de Hatay, donde 215.000 viviendas se han derrumbado o han quedado gravemente dañadas, especialmente en la ciudad de Antioquía, casi totalmente devastada.
Kahramanmaras, cercano al epicentro del seísmo, ha perdido 99.000 viviendas, seguida de Malatya, con 71.000 y Adiyaman, con 56.000, mientras que Adana y Kilis son las menos afectadas, con menos de 3.000 pisos destruidos.
La estimación de la Presidencia supera la de la confederación empresarial turca Türkonfed, que ha cifrado el daño económico de los seísmos en unos 84.000 millones de dólares, mientras que Naciones Unidas parte de una estimación de 100.000 millones.
El Banco Mundial adelantó el mes pasado una valoración de 34.000 millones de dólares, pero advirtiendo que los costes de rescate y reconstrucción serán mucho mayores, potencialmente el doble, y deben añadirse a la cifra, al igual que las pérdidas del PIB. EFE