El Indicador Mensual de Actividad Económica del Paraguay (Imaep), publicado por el Banco Central del Paraguay, registró un crecimiento interanual del 3,3% en abril de 2025, acumulando una expansión del 4,9% en el primer cuatrimestre del año.
Por su parte, el Imaep sin agricultura ni binacionales —indicador que permite observar el comportamiento del núcleo de la economía— exhibió un crecimiento interanual aún más robusto, del 3,8% en abril, y un acumulado del 6,1% entre enero y abril.
Agro y ganadería, a la baja
La diferencia entre ambos indicadores obedece al desempeño desfavorable del sector agropecuario. De acuerdo con estimaciones del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), la producción de soja experimentó una contracción significativa, arrastrando el rendimiento general del rubro agrícola. A esto se suman caídas en la faena de bovinos y aves, así como en la producción de leche y huevos, lo que afectó negativamente a la ganadería.
Sectores dinámicos impulsan la economía
En contraste, los sectores servicios y manufacturas presentaron dinámicas positivas, consolidándose como motores del crecimiento. La generación de energía eléctrica, particularmente en el eje de las binacionales, también aportó favorablemente al resultado económico del mes.
Asimismo, el sector construcción mostró un notable dinamismo, beneficiado por un mayor ritmo en la ejecución de obras públicas y privadas, reafirmando su rol como generador de empleo e inversión.
Diversificación como clave de sostenibilidad
La brecha entre el Imaep total y el Imaep sin agro y binacionales refleja con claridad la alta dependencia de la economía paraguaya de los sectores tradicionales, en especial la agricultura. Este escenario subraya la necesidad de avanzar hacia una matriz productiva más diversificada, que permita amortiguar los impactos de la volatilidad climática y de los precios internacionales sobre el desempeño económico.
