Tras una ola de medidas de estímulo aplicadas por Beijing para evitar un aterrizaje forzoso tras la crisis financiera global de 2008-09, las señales de recalentamiento se están multiplicando en la segunda economía del planeta, particularmente en el sector inmobiliario y en la banca.
Evitado el riesgo de una fuerte caída del PIB, los temores de los expertos se están enfocando ahora en una burbuja en el mercado de viviendas, y un colapso del sistema bancario.
Ante esto, autoridades y empresas chinas enviaron ayer potentes señales de que se preparan a reducir la liquidez. Aunque el ajuste es deseable, los analistas advierten que se si produce de manera muy abrupta puede enviar ondas de choque a través de la economía global, lo que explicó la fuerte caída registrada ayer por los mercados financieros en todo el planeta.
Amortización bancaria
Los temores sobre la salud del sector bancario de China aumentaron luego de que se conociera que los principales bancos del país triplicaron la cantidad de préstamos malos amortizados durante el primer semestre, movida que podría significar un proceso de limpieza antes de lo que podría ser una nueva ola de impagos.
Los cinco mayores bancos chinos, incluido el Industrial & Commercial Bank of China –el prestamista más rentable del mundo– eliminaron entre enero y junio 22.100 millones de yuanes (US$ 3.650 millones) de deuda que no pudo ser cobrada, de acuerdo a unos documentos citados por Bloomberg. Un año antes la cifra fue de 7.650 millones de yuanes.
Borrar lo peor de las deudas malas podría permitirle a los bancos mitigar un aumento explosivo en los ratios de cartera vencida en medio de una expansión de los defaults en la segunda economía del mundo.
China ha flexibilizado las reglas para eliminar la deuda de pequeñas empresas desde 2010 y las autoridades están presionando a los prestamistas a elevar las reservas de riesgo luego de un auge crediticio sin precedentes que comenzó en 2009.
“Los intereses de los bancos y los reguladores están alineados en acelerar las amortizaciones”, comentó a Bloomberg, Ma Kunpeng, analistas de Credit Suisse Founder Securities. “Esto los prepara para un día lluvioso”, agregó.
Estrechez de liquidez
El aumento en la cartera vencida se conoció mientras crecen las preocupaciones sobre una restricción de liquidez por parte del banco central chino.
Song Guqing, asesor de política del Banco Popular de China, comentó a Reuters el martes que la autoridad podría ajustar las condiciones de dinero en el sistema financiero para abordar los riesgos de inflación. Hace dos días se informó que los precios de las viviendas registraron el mayor salto en casi tres años en septiembre, un nuevo signo de una posible burbuja inmobiliaria.
La política monetaria “sólo se ajustará ligeramente a medida que la inflación sube. Hay algunas inquietudes sobre el préstamo bancario”, aseguró Song.
El influyente economista de la Universidad de Peking detalló que el ajuste “dependerá principalmente de las operaciones de mercado abierto y no puedo ver la posibilidad de un cambio en las tasas de interés o en los ratios de reserva de los bancos”.
A Beijing le preocupa que las inesperadas alzas en la inflación y en los precios de las propiedades en septiembre puedan ser en parte atribuibles a la inyección de liquidez en el mercado interbancario.
A raíz de esto, la tasa referencial de siete días trepó bruscamente ayer en la mañana hasta 4,55%, un alza de más de un punto porcentual frente al cierre un día antes.
Diario Financiero, Chile – RIPE