Cómo afrontar el «largo enero» y no arrastrar una crisis financiera para el 2016

Economista de SuperArte manifestó que el verano es una época de gastos, y que no está mal disfrutar en las vacaciones, sin embargo, mencionó la importancia de ser previsores y anticiparse a los gastos que se vienen, como el inicio de clases. Aseguró que con criterios realistas y una buena planificación se pueden conciliar el disfrute con la seguridad financiera.

Como para cualquier adversidad en la vida del ser humano, la prevención siempre es la mejor cura, según indicó la economista experta en finanzas personales de la Organización SuperArte, Adriana Bock, quien aseguró que el salario cobrado por las personas en diciembre debería haber sido reservado para los gastos de enero, y evitar así una crisis financiera, la cual podría arrastrarse para todo el nuevo año.

La profesional afirmó que si uno falla en esto, probablemente haya tenido que recurrir al uso de tarjetas de crédito para solventar los gastos corrientes del mes. Explicó que en ese caso, lo ideal sería cancelar la totalidad de la deuda para evitar que la misma se arrastre durante todo el año. “En caso de no poder cancelar la totalidad lo recomendable sería pagar la mayor parte posible y evitar volver a utilizar la tarjeta hasta que la deuda haya sido cancelada”, dijo.

Con respecto a los gastos, manifestó que se trata de algo que tenemos todos, ya que éstos son necesarios para el sostenimiento y mejoramiento de la calidad de vida, pero agregó que las personas necesitan comprender que no todos los gastos son iguales, ya que existe un orden de prioridades a tener en cuenta.

Para Bock, los gastos están clasificados en fijos (alquiler, cuotas, mensualidades), variables y opcionales, por lo que la distribución del ingreso entre estos tres tipos de gastos debe ser analizada y planificada para no verse forzados a contraer deudas innecesarias y sobre todo para potenciar la capacidad de ahorro, lo cual también debería ser una prioridad.

“No está mal que disfrutemos en las vacaciones, pero también es importante ser previsores y anticiparnos a los gastos que se vienen, por ejemplo el inicio de clases. Con criterios realistas y una buena planificación se pueden conciliar el disfrute con la seguridad financiera”, expresó.

¿Es época de gastar los ahorros?

En respuesta al cuestionamiento de si esta época es sensible a gastar los ahorros, Adriana Bock señaló que si se trata de ahorros realizados con miras a una meta (vacaciones), los cuales se cumplirían ahora, la respuesta es positiva. Asimismo, enfatizó que requiere de mucho cuidado la forma de invertir el dinero, evitando las excusas (gustos y caprichos) para gastar el fondo destinado a emergencias, pues este debe ser reservado para momentos de verdadera necesidad. “De lo contrario podemos sufrir dificultades más adelante”.

Salud y stress financieros

A modo de diferenciación, la profesional apuntó que una persona con buena salud financiera cuenta con un fondo de emergencias, sus deudas y gastos están bajo control y ahorra no menos del 10% de sus ingresos todos los meses, lo que le brinda una mayor libertad e independencia para tomar decisiones en los diferentes aspectos de su vida: laboral, familiar, personal, etc.

En cambio, sostuvo que una persona con stress financiero vive pendiente del próximo cobro y esto le resta posibilidades de elegir cuándo y cómo realizar sus proyectos de vida. Además dijo que se expone a riesgos de morosidad, demandas, embargos e incluso insolvencia si no acciona a tiempo para revertir la situación, y esto compromete seriamente su calidad de vida presente y futura.

Educación financiera clave

Por último, la economista aseguró que la educación financiera es una inversión casi indispensable para este 2016. “Ojalá este sea el año de la inversión para muchos. El momento es favorable y hay variadas opciones, pero necesitamos educarnos financieramente para poder aprovechar las oportunidades”, finalizó.

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